La ONG medioambiental Acciónatura, dedicada a la conservación de la biodiversidad, aseguró ayer mediante un comunicado que los ataques a rebaños de ovejas por parte de osos en el Pirineo catalán han disminuido hasta un 70% en los últimos 11 años. Acciónatura ofreció mediante un comunicado estos datos en defensa de esta especie tras la muerte esta semana, por parte de un oso, de dos ovejas de un rebaño en la comarca leridana de la Val d’Aran, que ha provocado la reapertura de la polémica y el resurgimiento de las voces contrarias a la presencia del plantígrado en el Pirineo catalán. Según Acciónatura, los datos del Departamento de Agricultura demuestran que si bien a comienzos de la reintroducción del oso, hace 11 años, se perdían 35 animales al año en los Pirineos por culpa del oso, ahora se producen alrededor de 9 pérdidas anuales. “En el Pallars no ha habido ningún ataque el último año. Para conocer la dimensión real de la situación, estaría bien poder conocer cuántas muertes de ovejas y cabras son causadas anualmente por otros animales, como por ejemplo perros o buitres”, señala la entidad. Acciónatura explica que el trabajo que lleva a cabo en la comarca del Pallars Sobirà demuestra que se pueden compatibilizar las actividades propias de la ganadería de montaña con la conservación del oso pardo.
Dieta estacional
En este sentido, explican que la dieta del oso es muy estacional. En la primavera se alimenta de los brotes que hay en los prados; durante el verano escoge las frutas más sabrosas, principalmente cerezas; y durante el otoño busca energía en los frutos secos como las avellanas o las bellotas. “A lo largo del año, pero sobretodo antes y después de la hibernación, busca proteínas en hormigas, troncos muertos y carroña. Ocasionalmente se reportan ataques a los rebaños”, asegura el comunicadode la organización. Para evitar estos ataques “hay que conocer los riesgos y prevenirlos”, señala la Acciónatura, que explica que desde la Generalitat de Catalunya se hace un seguimiento minucioso en el cual se comparan los mapas de paso de osos con los puntos donde se han registrado ataques para poder hacer predicciones de zonas de riesgo a las que los pastores no deberían llevar sus rebaños. “Esta acción se complementa con el agrupamiento de ovejas y cabras bajo la supervisión de un pastor profesional. Para que esta persona tenga unas condiciones idóneas, Acciónatura ha amueblado íntegramenteuna cabaña de la montaña con la ayuda de una empresa de muebles”, explican añadiendo que “gracias a estas medidas de prevención cada vez se reportan menos ataques”. Además, “si con todo se certifica que la muerte de una oveja, cabra, vaca o yegua ha sido causada por un oso, la Generalitat indemniza a su propietario siguiendo un baremo que siempre está por encima del precio de mercado”.