El proyecto de la línea de 400 kV Peñalba-Isona ha recibido cerca de mil alegaciones por parte de instituciones, entidades y particulares del Pallars Jussà. El plazo para presentar estas alegaciones acaba hoy. Desde la Plataforma unitaria contra la Autopista Eléctrica se han recogido cerca de 900 alegaciones que ya han sido presentadas a la delegación del Govern en l’Alt Pirineu. Con respecto al Consell Comarcal, ha presentado las alegaciones de los abogados de la Diputación de Lleida y los ayuntamientos han cogido este documento y han añadido puntos concretos de su municipio. El impacto ambiental de la línea y contra el patrimonio son algunos de los puntos que justifican el no al corredor. Las alegaciones presentadas por el Consell Comarcal del Pallars Jussà exponen que el exceso de afectaciones eléctricas tiene que condicionar la no autorización del proyecto. Según se desprende del proyecto, las funciones de este corredor tienen que ser servir de red de transporte eléctrico a través de una interconexión entre Aragón y Catalunya, asegurar la alimentación eléctrica del tren de alta velocidad (AVE), de ayuda a la distribución y de evacuación de generación. El Consell Comarcal expone que el Aragón y Catalunya ya están conectados a través de siete líneas eléctricas, cinco de las cuales pasan por la demarcación de Lleida. Hacer pasar la línea que tiene que asegurar la alimentación del AVE por Jussà no lo encuentra correcto.