El biólogo experto en oso pardo Marc Alonso, el presidente y el vicepresidente de la asociación Nature Comminges, y la bióloga y educadora ambiental Eva Jordà fueron invitados por la AGIPNAESM para contribuir en la formación de los guías de Val d’Aran, Pallars y l’Alta Ribagorça, a la que también asistieron agentes rurales de Catalunya, en el refugio Era Honeria (Val de Toràn). Los expertos participantes en esta actividad coincidieron en que es la primera vez que se organiza un encuentro de este tipo entre Francia y el Estado Español, desde la introducción de los osos del Pirineo central, y advirtieron de la necesidad de que haya más información para los vecinos de las poblaciones y los guías que conviven con esta especie y con otras grandes especies, especialmente en temporadas de batidas. Marc Alonso explicó que osos y jabalíes comparten bosques coincidiendo con las batidas de caza, y las consecuencias que en ocasiones se convierten en noticias negativas para el plantígrado. Alonso añadió que cuando hay un encontronazo por sorpresa, los osos pardos tienen la costumbre de hacer cargas de advertencia y ponerse de pie, sin atacar, si no nos movemos se irá tras la exhibición de fuerza. El experto puntualizó que este es el principal motivo de incidentes y que han sido siempre con cazadores, cuyos perros los ponen nerviosos y ante la exhibición el cazador acaba disparando y el oso pegando manotazo para apartar al “estorbo”. En cuanto a la cantidad de individuos, Alonso reveló que en las analíticas genéticas realizadas en los últimos cuatro años en Catalunya se contabilizan 17 osos, pero se cree que hay más sin identificar. Algunos guías mostraron su interés en ofertar el oso pardo como reclamo turístico, y la ponente Eva Jordà propuso que se venda Pirineo y no solamente una especie, aunque reconoció que el oso vende.