La DGA cierra el acuerdo con la Generalitat para garantizar la cobertura desde verano, con el objetivo de llegar a la Costa Dorada El mantenimiento de los equipos le costará 40.000 ? al año a la Corporación aragonesa.Más televisión para todos. Esto es lo que garantiza el acuerdo cerrado por los gobiernos aragonés y catalán y sus respectivas corporaciones audiovisuales para ampliar la cobertura desde este mismo verano, que establece que TV3 recuperará la señal en Aragón y que la autonómica se verá por primera vez en Cataluña. El objetivo de la DGA es que Aragón TV se llegue a ver a través de la TDT en los próximos meses en la Costa Dorada, donde miles de aragoneses tienen su segunda residencia.Cada Administración se hará cargo de las inversiones necesarias y de mantener los equipos en su territorio, lo que implicará un desembolso anual de 40.000 euros a Aragón.El presidente de la Corporación Aragonesa de Radio y Televisión (CARTV), Ramón Tejedor, explicó ayer que los canales catalanes se podrán ver exactamente en las mismas zonas y municipios de la Comunidad que ya disponían de este servicio antes del apagón analógico. “Ni más ni menos”, sentenció Tejedor. En algunas zonas de la capital aragonesa se llegaba incluso a ver la cadena catalana en función de la orientación de las antenas de las casas, aunque el mayor interés en recuperar los canales catalanes (TV3, C33, K3 y 3/24) se circunscribe al Aragón oriental, donde se habla el catalán y su población se beneficiaba de la cobertura analógica. Las negociaciones comenzaron el año pasado entre las partes y solo está pendiente de fijar un día para la firma a lo largo de este mes, según fuentes oficiales de la DGA.
La Costa Dorada, el objetivo
No obstante, la principal novedad que traerá el acuerdo será la ampliación de la cobertura territorial de Aragón TV. La señal llegará por primera vez a una amplia franja de Cataluña, de norte a sur en una banda de entre 60 y 70 kilómetros al este del límite territorial, según explicó Tejedor. “Podrá incluso verse en Lérida capital, pero por una cuestión de potencia no se alcanza toda la Costa Dorada. Pero nos gustaría llegar y hay posibilidades de que se vea”, manifestó. Para lograr que la señal llegue a los hogares catalanes se instalarán equipos en dos repetidores catalanes, situados en Alpicat (Lérida) y en Monte Caro (Tarragona). Técnicamente se denomina “desbordamiento de señal”, para lo que se necesita instalar equipos en los denominados remisores -repetidores-. Los catalanes, por su parte, deberán instalar 30 unidades para extender de nuevo la cobertura a Aragón.
Audiencia potencial
El presidente de la Corporación aragonesa calculó que este acuerdo implicará que Aragón TV llegue a una audiencia potencial de 200.0000 personas. Su incidencia no se podrá controlar en la Comunidad, dado que los datos de seguimiento de Kantar Media (como se llama ahora la empresa de medición de audiencia Sofres) están regionalizados. No obstante, se podrán conocer a través de los resultados autonómicos de Cataluña. Con la llegada de la señal digital se puede controlar de forma mucho más sencilla la cobertura de las televisiones autonómicas, que en la mayoría de los casos se reduce a sus límites territoriales, salvo que emitan por satélite o por plataformas de pago (para lo que los usuarios requieren disponer de parabólica o de cableado). De hecho, Aragón TV se puede coger en parte de Navarra y de La Rioja por el hecho de que se utiliza un repetidor de la Comunidad Foral para hacer frente a la mala señal que tienen las Altas Cinco Villas. Hasta el desembarco de la TDT y por obra y gracia de las emisiones analógicas, en el territorio aragonés se podía ver la señal de televisiones autonómicas ‘ajenas’ como ETB, TV3 o Canal 9. De hecho, incluso en los registros de audiencias de hace un año figuraban ‘shares’ residuales de otras cadenas de Forta que, entre todas, llegaban a sumar en torno al 1% de cuota de pantalla en Aragón. El seguimiento de TV3 en el Aragón oriental viene de hace más de quince años, ya que entonces solo se podían captar las televisiones generalistas y la población, con su conocimiento del catalán, podía disfrutar de una mayor oferta televisiva con los canales de la comunidad vecina.